Las compañías de telecomunicaciones suelen ser bien turbias. Cuando tu aceptas un contrato vía telefónica, se te advierte que se realizará una grabación de la llamada. Se supone que esa grabación queda almacenada en los servidores de la compañía y ante cualquier disputa ellos tienen la carga de la prueba. Muchas veces las compañías dicen que se les perdió, que no la encuentran o que se borró la grabación. Entonces, lo que dice el cliente ante la Subtel es lo que vale.
Tú también puedes pedir copia de la grabación, pero muchas veces solo presencialmente en una sucursal.
Para las compañías, mientras menos información, documentación o pruebas tenga el cliente, es más fácil meterle el p...ulgar en el ojo.