Hace unas noches había un ruido de pelea arriba en el techo, los perros se volvían locos y no me dejaban escuchar música por el ruido. Salí a ver, me subí por una escalera y habían dos gatos peleando. Se miraban feroz y quietamente. El que pestañeaba perdía y se merecía el camino de la derrota....en eso tomé un tubo plástico que estaba en el techo y se los tiré...ni se movieron los qls....luego bajé y tomé un codo de pvc que tenía a mano y subí para tirárselos...naca, ni un movimiento. Hice sonar el techo con un palo y ahí comenzó el round.
Ohhh ctm, que manera de sacarse la chucha esos dos. Se revolcaban de un lado para otro como quien voltea la masa de un pan gigante; combos, garras y espaldas engrifadas. Como si fuese el baile de una serpiente belicosa esa maraña peluda enroscada se fue perdiendo de mi vista y el ruido del escándalo se convirtió en lo que acabo de escribir.