Los cupos "autofinanciados" son pocos (independiente si son universidades públicas o privadas), la mayoría son 3 años (hay algunos pocos de 4), cuestan alrededor de 6,5 millones por año y muchas te exigen no poder trabajar como médico en ningún lugar durante esos 3 años.
A esas becas en algunos lugares se les llama "papá paga", porque habitualmente las familias asumen mantener a ese profesional para que pueda hacer ese programa de especialidad.
No sé si siga así, pero la PUC te pagaban mientras hacías la beca pero te exigían esa dedicación exclusiva (igual el pago era menor que lo se podía ganar ejerciendo, así que el apoyo familiar aplicaba también).
Es un tremendo tema el de los especialistas, como dijeron no es llegar y aumentar drásticamente los cupos para especializar, y más que limitaciones artificiales (que pueden haberlas, pero no me costa), creo que las limitaciones van por los campos clínicos y la disponibilidad de buenos formadores. Creo que un aumento brusco de los cupos iría de la mano sí o sí de una disminución de la calidad de esa formación.
En todo caso, seguro que se podría mejorar el sistema de retorno para los que los forma el sector público, es un hecho de que algunos no vuelven, otros no terminan de devolver los años que le corresponden y otros cumplen sus 6 años y se van de una.
Mientras, el déficit sigue. Acá nos estamos batiendo gracias a especialistas extranjeros y compras de servicios. Y curiosamente acá ni siquiera competimos con el área privada, sino que contra el mismo sector público pero de Santiago, que paga mejor, al menos en mi área.
