Ha pasado mucho tiempo. Inicié la construcción de mi casa en Olmué el 2021. El arquitecto se enfermó de COVID, lo cual paralizó la construcción de la cabaña por unos meses hasta que el 2022 se finalizó. El envió los documentos para los permisos de construcción a la Dirección de Obras Municipales, pero fueron rechazados por una serie de observaciones y antecedentes faltantes. Yo le reclamé a él, pero el arquitecto desapareció del mapa y dejó de contestar teléfonos, mail, etc. Dentro de las observaciones estaba justamente la factibilidad de agua. Alcantarillado lo tengo con factibilidad. Pasó un tiempo y logré contratar a otro arquitecto para que saque los permisos. Lo primero que hizo fue enviar los planos de la cabaña al SII para lograr cambio del destino de bien raíz, lo cual fue aceptado y ahora tengo el avalúo fiscal de la propiedad con destino habitacional, antes sitio eriazo. Esto me permitiría rebajar las contribuciones a contar del 2025. Sin embargo queda pendiente el tema del agua y el resto de observaciones de los permisos, las cuales tienen que ver básicamente con planimetría e informes de aislamiento térmico y normativa de incendios. Estas observaciones no serían difíciles de completar. Lo más complejo es lo del agua otra vez. Preguntando en un chat de vecinos me explicaron que el agua potable actualmente la distribuye un camión aljibe contratado por la gobernación. Para recibirla hay que inscribirse en la Municipalidad llenando la ficha de protección social. Teoricamente con los datos de la licitación del camión aljibe que están publicados en la web de mercado publico, serían suficientes para enviarlos a Seremi de Salud para que me otorgue la factibilidad de agua de una vez por todas, junto con una carpeta de planos de la cabaña y sus estanques.
Sin embargo parece que este nuevo arquitecto no conoce o no le interesa el tramite para obtener la aprobación del proyecto de sistema de provisión de agua potable para vivienda particular, así que creo que nuevamente me podría dejar de botado. La próxima semana quedamos en evaluar la situación.
Si te compras un terreno fijate que este dentro del terreno de distribución de una cooperativa de agua potable (actualmente denominada servicio sanitario rural). Ya que se está construyendo un acueducto de agua desalinazada proveniente de Puchuncaví, lo cual solucionaría parcialmente el problema para algunas casas a contar de fines de 2025. Y en 2028 el tema quedaría definitivamente resuelto con agua procedente del embalse los Aromos.