Para quienes no estén enterados, Carmageddon fue un título liberado el año 1997. Es un juego de carreras con un aire Mad Max con el añadido que puedes obtener puntos extras atropellando personas.
Volviendo al tema inicial, la venta formal del juego en cuestión tenía buenos números hasta que en 1998 promulgaron una ley que prohibía la venta, arriendo y comercialización en todo Buenos Aires. La explicación de un diputado luego de promulgar la ley:
El juego es más que denigrante. Se persigue a la gente por todos lados e incluso hasta por arriba de la vereda. Es una clara y directa incitación al delito a través del auto. Ahora esperamos que las multas sean tan exitosas como el juego.
Fines de los 90 en una ciudad latinoamericana con grabadores de CD y DVD trabajando a full, tengo mis serias dudas de que dicha prohibición haya tenido el efecto disuasivo que los diputados tenían en mente. Efectivamente el juego dejó de venderse de manera formal en la ciudad de Buenos Aires pero en el resto del país eso no ocurría. Además se podía obtener pirata pues la fiscalización era inexistente. Con la mano en el corazón respetables lectores: ¿cuánto del software y juegos que utilizaban a inicio de los 2.000 eran adquiridos legalmente y cuánto de manera pirata?
Y volviendo a la ley, lean el artículo 2 de dicha ley.
Art. 2º - Prohíbese, asimismo, en todo el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires, la distribución, comercialización, venta y /o alquiler y promoción publicitaria de cualquier clase de videojuegos o programas (software) para entretenimientos electrónicos orientados a la destrucción de personas por medio de la conducción de un vehículo automotor o que encuadren en las conductas tipificadas en la legislación de tránsito vigente en la ciudad.
La ley aún sigue vigente y da para pensar en el gasto administrativo de promulgar una ley que en la práctica no sirvió ni sirve para nada. Es más, ¿Cuántos juegos actuales son ilegales a los ojos de la descripción del artículo 2? El paralelo de prohibir juegos violentos y música que habla de violencia para supuestamente bajar las tasas de delito es evidente.
Menos mal que no prohibieron Tekken: incentiva a pelear con tu abuelo por los terrenos en el sur.