Recién lo vi, qué lastima por su familia.
Tengo sentimientos encontrados con este loco, por un lado, estoy convencido que su estilo para decir las cosas, sin anestesia, ayudó un montón al fútbol chileno, donde los periodistas y comentaristas eran una tropa de lamebolas que jamás criticaban nada, todo lo encontraban la raja. Después que este tipo se popularizó, se comenzaron a ver a más comentaristas diciendo las cosas como son, sin preocuparse si al resto le gustaba o no. Y eso a la larga empezó a pavimentar el camino que había que recorrer para lograr tener un fútbol chileno -selección- de mejor nivel, porque es como que todos despertaron y se dieron cuenta que ya no servía ser un conformista, sin personalidad, para conseguir el triunfo.
Por otro lado, su racismo, xenofobia y chauvinismo me resultaban repulsivos.
Como sea, QEPD.