Amable recordatorio que Pinocho, a diferencia de Mao, Pol Pot, Lenin y su cáfila, Chávez, la familia Kim y el resto de las izquierdas del mundo, hizo un plebiscito, lo perdió y dejó el poder. Seguro a regañadientes, seguro con amenazas, seguro con pillerías, pero lo hizo. Si no, no podríamos...