Se trata de Amur, un tigre siberiano del Parque Safari Primorski, en Rusia, quien entabló una cordial relación con Timur, una cabra que debía ser su alimento. Fueron los mismos funcionarios quienes introdujeron a Timur en la jaula del felino, esperando que éste cazara a su presa, como pretende un programa de alimentación del parque, que permite que los animales de mayor tamaño cacen sus propias presas. Pero Amur jamás le hizo daño a Timur, permitiéndole incluso dormir en su refugio, mientras que él dormía en el techo. Además, la cabra sigue a su nuevo amigo adonde quiera que vaya, según consigna SoyChile.Donde esta la amistad!?
Todos hemos dejado un plato servido y no lo pescamos, hasta q nos da hambre...