- Se incorporó
- 18 Abril 2011
- Mensajes
- 677
Review de Beyerdynamic Custom Studio
auspiciado por
INTRO
Beyerdynamic es una de esas marcas que en el escenario mundial, está totalmente posicionada en el mundo del audio, tanto a nivel de usuario como profesional.
Una gran gama de audífonos engloban ya legendaria lista de audífonos que han perdurado en el consciente de los amantes del audio (DT770, DT1350, T1, etc) por décadas.
Hace algunos años Beyerdynamic dio un batacazo con el lanzamiento de los Custom One Pro, con su versatilidad, calidad de sonido, comodidad, customización y precio, fue un verdadero “bang for the buck”, pero que sin embargo, no logró realmente romper las barreras de una aceptación mas mainstream.
Este año Beyerdynamic arremetió con una nueva gama de productos, potenciando la gama Custom. Entre los cuales se encuentra el Custom Studio.
Los invito a conocer, que prestaciones nos trajo este modelo.
EMBALAJE Y CONSTRUCCION
Custom Studio, es la version “estudio” del Custom Pro One. Visualmente son casi idénticos, diferenciandolos solo en una serie de detalles estéticos.
La caja dispone la usual buena calidad de impresion, ilustrativa y comprensiva. Una compartimentalización minimalista nos entrega la unidad en el interior, sin mucho padding ni protección, pero que sí proporciona seguridad adecuada que mantiene su integridad. Allí podemos encontrar junto a la unidad, los accesorios que constan de los tipicos manuales de usuario y garantia, el cable coiled, una bolsita de transporte bastante austera y un kit de desamblaje de las placas metalicas.
Los Studio disponen de una muy buen mezcla entre partes plasticas y de metal, con una ya clásica terminacion de negro matte muy bien lograda. Por un lado la “columna vertebral” del audífono, es su cintillo de metal que une ambas copas, estas estan conformadas por un housing de plastico con una atractiva placa metálica con el engrave del modelo. El cintillo dispone de una cuerina de buen aspecto y con padding para la cabeza, esta está adherida al cintillo de metal por 4 botones de facil acceso, por lo que puede ser reemplazada fácilmente para ser customizada o respuesta (útil configuración).
Como fue expuesto anteriormente las copas disponen de un familiar juego de placas de metal que pueden ser también extraídas, para ser customizadas o cambiadas. En su parte inferior encontramos el “Custom Slider” que nos permite ajustar un selector, que gradualmente realiza la apertura del bass reflex en 4 niveles diferentes (que en realidad son 3, puesto que el número 1 es una configuración de base).
Los pads de las conchas son de velour, muy cómodas, pero imagino que son propensa a desarrollar el problema de baja respirabilidad en ambientes más calurosos. Las pruebas han sido realizadas en esta época del invierno, por lo que no he tenido ningun problema. La fuerza de compresión del cintillo, va por el lado de lo moderado, por una parte la sensación sobre el oído es sensacional, ya las copas descansan en toda la periferia del oído (sin contactar al menos en mi caso, en ninguna instancia con mi oreja), por lo que el apoyo se efectúa en todos los procesos óseos tanto de la cara, mandíbula y la zona temporo occipital, quitando cualquier estrés posible sobre la oreja. Por otro lado, esto permite un espectacular sello y aislación de sonido ambiente, por lejos de los mejor que he probado en un audífono cerrado. Jack de 3.5mm que si bien es removible, no dispone de un mecanismo de bloqueo, por lo que me da la impresion que podria deatacharse con mayor facilidad, pese a que nunca tuve problemas en mi experiencia.
La única queja que tuve con el diseño, fue con los cables que salen de la copa izquierda hacia la copa derecha, si bien no sobresalen mucho, continuamente al llevar mis manos a la cabeza sentía que los podria contactar accidentalmente. No tuve problemas personalmente, pero su exposición me causa una cierta incertidumbre sobre su durabilidad y resistencia.
SONIDO Y PERFORMANCE
Como señalé en un principio los Custom Studio, son la versión de “estudio” de los Custom One Pro. Esto implica un tunning específico por una parte, y por otra un cambio en la impedancia de los audífonos.
Los Studio presentan 80 Ohms, a diferencia de los 16 Ohms de los Custom One Pro. Esto se traduce en una mejor transición a mesas de sonido, y permite un margen aceptable para ser usado con las interfaces de audio más hogareñas de la actualidad. Junto con esto, los Studio disponen de drivers dinámicos de 45mm, mientras que los One Pro disponen de 50mm.
Claramente la posibilidad de customizar el sonido es una de las prestaciones más atractivas de este audífono. Si bien pude probar con anterioridad los Custom One Pro, fue con un equipamiento portable y sin realizar pruebas con el Custom Slider. Por lo que no dispongo de los elementos suficientes para realizar una comparación directa entre ambos.
Sin embargo, si dispuse de mis componentes de audio, con los que estoy familiarizado de buena forma.
Los dispositivos usados para la comparación fueron:
auspiciado por
INTRO
Beyerdynamic es una de esas marcas que en el escenario mundial, está totalmente posicionada en el mundo del audio, tanto a nivel de usuario como profesional.
Una gran gama de audífonos engloban ya legendaria lista de audífonos que han perdurado en el consciente de los amantes del audio (DT770, DT1350, T1, etc) por décadas.
Hace algunos años Beyerdynamic dio un batacazo con el lanzamiento de los Custom One Pro, con su versatilidad, calidad de sonido, comodidad, customización y precio, fue un verdadero “bang for the buck”, pero que sin embargo, no logró realmente romper las barreras de una aceptación mas mainstream.
Este año Beyerdynamic arremetió con una nueva gama de productos, potenciando la gama Custom. Entre los cuales se encuentra el Custom Studio.
Los invito a conocer, que prestaciones nos trajo este modelo.
EMBALAJE Y CONSTRUCCION
Custom Studio, es la version “estudio” del Custom Pro One. Visualmente son casi idénticos, diferenciandolos solo en una serie de detalles estéticos.
La caja dispone la usual buena calidad de impresion, ilustrativa y comprensiva. Una compartimentalización minimalista nos entrega la unidad en el interior, sin mucho padding ni protección, pero que sí proporciona seguridad adecuada que mantiene su integridad. Allí podemos encontrar junto a la unidad, los accesorios que constan de los tipicos manuales de usuario y garantia, el cable coiled, una bolsita de transporte bastante austera y un kit de desamblaje de las placas metalicas.
Los Studio disponen de una muy buen mezcla entre partes plasticas y de metal, con una ya clásica terminacion de negro matte muy bien lograda. Por un lado la “columna vertebral” del audífono, es su cintillo de metal que une ambas copas, estas estan conformadas por un housing de plastico con una atractiva placa metálica con el engrave del modelo. El cintillo dispone de una cuerina de buen aspecto y con padding para la cabeza, esta está adherida al cintillo de metal por 4 botones de facil acceso, por lo que puede ser reemplazada fácilmente para ser customizada o respuesta (útil configuración).
Como fue expuesto anteriormente las copas disponen de un familiar juego de placas de metal que pueden ser también extraídas, para ser customizadas o cambiadas. En su parte inferior encontramos el “Custom Slider” que nos permite ajustar un selector, que gradualmente realiza la apertura del bass reflex en 4 niveles diferentes (que en realidad son 3, puesto que el número 1 es una configuración de base).
Los pads de las conchas son de velour, muy cómodas, pero imagino que son propensa a desarrollar el problema de baja respirabilidad en ambientes más calurosos. Las pruebas han sido realizadas en esta época del invierno, por lo que no he tenido ningun problema. La fuerza de compresión del cintillo, va por el lado de lo moderado, por una parte la sensación sobre el oído es sensacional, ya las copas descansan en toda la periferia del oído (sin contactar al menos en mi caso, en ninguna instancia con mi oreja), por lo que el apoyo se efectúa en todos los procesos óseos tanto de la cara, mandíbula y la zona temporo occipital, quitando cualquier estrés posible sobre la oreja. Por otro lado, esto permite un espectacular sello y aislación de sonido ambiente, por lejos de los mejor que he probado en un audífono cerrado. Jack de 3.5mm que si bien es removible, no dispone de un mecanismo de bloqueo, por lo que me da la impresion que podria deatacharse con mayor facilidad, pese a que nunca tuve problemas en mi experiencia.
La única queja que tuve con el diseño, fue con los cables que salen de la copa izquierda hacia la copa derecha, si bien no sobresalen mucho, continuamente al llevar mis manos a la cabeza sentía que los podria contactar accidentalmente. No tuve problemas personalmente, pero su exposición me causa una cierta incertidumbre sobre su durabilidad y resistencia.
SONIDO Y PERFORMANCE
Como señalé en un principio los Custom Studio, son la versión de “estudio” de los Custom One Pro. Esto implica un tunning específico por una parte, y por otra un cambio en la impedancia de los audífonos.
Los Studio presentan 80 Ohms, a diferencia de los 16 Ohms de los Custom One Pro. Esto se traduce en una mejor transición a mesas de sonido, y permite un margen aceptable para ser usado con las interfaces de audio más hogareñas de la actualidad. Junto con esto, los Studio disponen de drivers dinámicos de 45mm, mientras que los One Pro disponen de 50mm.
Claramente la posibilidad de customizar el sonido es una de las prestaciones más atractivas de este audífono. Si bien pude probar con anterioridad los Custom One Pro, fue con un equipamiento portable y sin realizar pruebas con el Custom Slider. Por lo que no dispongo de los elementos suficientes para realizar una comparación directa entre ambos.
Sin embargo, si dispuse de mis componentes de audio, con los que estoy familiarizado de buena forma.
Los dispositivos usados para la comparación fueron:
- Sennheiser H650
- Audiotechnica M50
- Pioneer HDJ 2000
- Fiio E10k
- iFi Nano
- Cowon Plenue M
- Audioengine B1
- Cayin C5
- Focusrite Scarlett 2i2
- Samson S-amp
La firma del sonido de los Studio dispone de mucha claridad y transparencia, con una imagen estéreo precisa, sin perjuicio de proporcionar mucha tridimensionalidad (lo cual creo que se debe a las características de las conchas). El soundstage está muy bien logrado, lo que junto a una excelente resolución, permiten que la presentación en todas las frecuencias sea muy balanceada.
La interacción con el Custom Slider es totalmente fluida, no es la típica experiencia de bass boost, donde la imagen se expande totalmente, sino que nivel tras nivel permite una mayor extensión de la zona baja, con bastante coherente y linealidad…
Si bien no hay mucha claridad o especificidad, en cuanto a las caracteristicas del driver dinamico usado en los Studio, hay razones para pensar que puede haber algún tipo de implementacion de Tecnologia Tesla en los audífonos. Hace un par de años, cuando Beyerdynamic anunció el desarrollo de la gama actual, mencionaron la creacion de los Custom One Tesla, el cual llevaría una nueva iteración del driver con dicha tecnología, en un formato más reducido, compacto y funcional… Finalmente aquel modelo no fue lanzado, por lo que doy rienda suelta a la libre interpretación que parte de ese proyecto se pueda haber encarnado en los Studio. Es muy similar la sensación al escucharlos, que a lo que generan los T51p, ya que en mi experiencia la tecnología Tesla, sónicamente es lo más cercano a lo que los audífonos planares puedes ofrecer, en el mundo de los drivers dinámicos.
Los Studio tienen la increíble habilidad de poder brindar una experiencia crítica y hasta incluso clínica, típica de las necesidades de estudio, pero a la vez, disponen del carisma y actitud para poder ser usado en escuchas más entretenidas y casuales, en parte, gracias a sus características customizables.
En mi experiencia con los Studio, un factor muy determinante al momento de descubrir las capacidades de este set, fue la Amplificación.
Directamente conectado a el E10k, los Studio suenan desbalanceados por un lado y totalmente inertes por el otro, inclusive en la configuración de high gain. Lo cual me llamó la atención puesto que hasta mis HD650 de (300 Ohms), pueden ser manejados por el Fiio, inclusive sin un desbalance muy evidente.
La performance con el iFi Nano (review en proceso) por otro lado, fue correcta, dadas las características de transparencia y resolución del Nano. Personalmente preferi el match junto a la Scarlett 2i2, ya que su más clínica presentación, le otorgó más margen para la concatenación del preset del custom slider, brindándole un poco más de versatilidad a la escena sonora. Una experiencia similar fue lo brindado por el Samson S-amp, que no tuvo muchos problemas el mover simultáneamente a los 4 audífonos a la vez, sin perder gain, y dándole cuerpo suficiente a la performance de los Studio.
Sin embargo, no fue hasta que lo matchie con el Cayin C5, donde realmente los Custom Studio mostraron su verdadera cara.
Al igual como lo comente en el review del C5, los mejores resultados que se dieron con el amp, fueron fuentiandolo con line out propietarios, como el del Fiio E10k y del B1 de Audioengine.
Imagino que las aseveraciones de un “Soundstage 3D”, que muchos usuarios le asignan al C5, difícilmente puedan ser más explícitas como lo fueron con los Studio. Escuchar Jazz en 24bit con este rig, fue una verdadera delicia. El posicionamiento, la resolución, la escena, la amplitud, la separación...géneros acústicos, funk, soul, pop, electronica, clásico y hasta sinfónico…
Todos lograron convenir una sinergia fenomenal con este match. El desafío generalmente siempre son los géneros con mucho mas gain, treble y bajo, los Studio logran resolver este enigma a base de su idiosincrasia.
Rock y Metal, fueron disfrutados en el más amplio espectro con los Studio. Si buscaba una experiencia analitica, la disponian, si deseaba una ronda emocional con un bajo vibrante, también la podía desarrollar.
Porque si bien la imagen estéreo legendaria de los M50 es difícilmente replicable, más allá de burdos intentos efectuados por wannabis, la amplitud sonora de los Studio permite una experiencia igualmente atractiva, sumado a las capacidades en la extensión de la zona baja y la superior rendición de la zona media y alta. Lo cual me llevó a un dilema, que realmente no esperaba que aconteciera...
Eran los Custom Studio, mis nuevos audífonos de referencia? Serían los Beyerdynamic, los encargados de destronar la hegemonía (ya legendaria) que a base de bancamiento puro fue logrado por los M50 año tras año.
Si una amplificación competente no fuese pretexto, creo que si.
Es cierto, los M50 pueden ser usados prácticamente con cualquier dispositivo. Y se pueden encontrar a la mitad de precio que los Studio… Pero teniendo todos los factores controlados, la resolución que brindan los Studio, echando mano de su precisión y posicionamiento, hacen difícil el desarrollar argumentos tecnicos que favorezcan a los M50.
Es tan radical la experiencia con los Studio, que hasta mis HD650, parecen vejestorios lánguidos frente a la fresca y dinámica performance de los jóvenes y eréctiles Studio. Si. Los Studio (con el match del C5) tienen un soundstage mas empatico que el que proporciona los HD650. Si...si...tienen razón. En mi review del C5, comente que el match con los HD650 no es el mejor. Pero aun asi, el solo hecho de que los Studio logren realizar esta hazaña, siendo un audífono cerrado, es realmente impresionante.
Supongo que la versatilidad de los Studio, es un atributo que los ingenieros de Beyerdynamic muy inteligentemente han querido usar como bandera de lucha, para lanzarse con caballería completa y de la mano de una nueva gama de productos, que amplían las posibilidades de lograr una “experiencia musical” para cualquier segmento; desde el más clinico ingeniero de estudio, pasando por el más incipiente audiófilo, hasta llegar a él más causal audio entusiasta.
Esta por verse si los Studio, lograran trascender a las ligas legendarias de los M50’s, V-Modas, AKGs y Shures… en los anales olímpicos de la referencia de estudio. Los Studio solo muestran su real cara, al ser acompañados por una sección de amplificación competente que les permita mostrar sus preciados atributos en toda su gloria y esplendor. Sin antes ser desechados, por efímeras y engañadoras escuchas de minuto, en el sinfín de tiendas que hoy existen en diferentes partes del mundo, donde los autoentusiastas polulamos.
Sumado al hecho que, a todas luces, no es muy sencillo conseguir este modelo. No genera un futuro muy auspicioso para apostar sobre el destino de los Studio.
Por mi parte, y de la manera más inesperada, he encontrado mi proximo “upgrade”.
Gracias Beyerdynamic y gracias Mediaplayer, por expandir mis posibilidades.
Dese cuenta por usted mismo y comentame como fue su experiencia con los Studio.
Puede encontrarlos hoy en Mediaplayer.