- Se incorporó
- 26 Enero 2008
- Mensajes
- 842
Cuando uno piensa en el primer vuelo (con motor) siempre visualiza la hazaña de los Wright brothers por allá en 1903, sin embargo en 1910 en los potreros del fundo “Chacra Valparaíso” acá en Santiago/Ñuñoa, (por lo que hoy es la villa Frei) otros hermanos, los Copetta (Félix y *César) lograban realizar el primer vuelo con motor en Chile, era el Domingo 21 de Agosto de 1910 (aunque en rigor el primer vuelo fue el día antes por algunos segundos).
Notable acto el echarse a volar así sin más, sobre todo porque los pioneros de la aviación en aquellos años lo hacían todo, eran pilotos, diseñadores, constructores, soñadores y un poco chiflados (en general para el común del vulgo).
Pero había algo de místico y evocador en ese acto: sentir la brisa de frente, la sensación de libertad en algo que de no haber sido por el bullanguero motor Gnome de 50 HP, podría haberse asimilado con un volantín gigante hecho de tensores, palillos y tela.
Creo que para el centenario una casa de estudios llevó a cabo el desafío junto con estudiantes de diseño de hacer una réplica de aquella nave, un Voisin Celular, que hoy se encuentra en el Museo Aeronáutico.
Una vez más contemplando aquella añeja fotografía me queda la sensación nostálgica y evocadora de aquellos tiempos en que los “antigüos” hacían las cosas a su modo, con mucho que perder y todo por lograr.
*César Copetta, 21 Agosto 1910
Notable acto el echarse a volar así sin más, sobre todo porque los pioneros de la aviación en aquellos años lo hacían todo, eran pilotos, diseñadores, constructores, soñadores y un poco chiflados (en general para el común del vulgo).
Pero había algo de místico y evocador en ese acto: sentir la brisa de frente, la sensación de libertad en algo que de no haber sido por el bullanguero motor Gnome de 50 HP, podría haberse asimilado con un volantín gigante hecho de tensores, palillos y tela.
Creo que para el centenario una casa de estudios llevó a cabo el desafío junto con estudiantes de diseño de hacer una réplica de aquella nave, un Voisin Celular, que hoy se encuentra en el Museo Aeronáutico.
Una vez más contemplando aquella añeja fotografía me queda la sensación nostálgica y evocadora de aquellos tiempos en que los “antigüos” hacían las cosas a su modo, con mucho que perder y todo por lograr.
*César Copetta, 21 Agosto 1910