Hay actores que a pesar de haber trabajado en muchas películas, inevitablemente los asociamos a un papel en particular. Se me vienen a la mente Toby Maguire, Robert Downey Jr, Michael J. Fox, Christoper Loyd, Mark Hamill, etc. Y en el ámbito local, Adriano Castillo está fuertemente asociado a un icónico personaje de la TV Nacional: el Compadre Moncho.
Antes de pasar a la nota propiamente tal considero que el personaje del Compadre Moncho es de aquellos que se roban el show, un personaje pensado como secundario que es tan interesante y carismático que no puedes concebir el show sin él. Tenemos a Don Ramón, los pingüinos de Madagascar, el Chingao, Luis de Ant-man, etc.
Pero al igual que Robert Downey Jr, Adriano Castillo ha tenido muchos oficios. No solamente fue el actor que encarnó al querible Compadre Moncho o la voz detrás de Jon Bonachon, sino que también fue PROGRAMADOR DE UNA IBM 1401, oficio que es la razón de que estemos escribiendo de él en un sitio para procastinadores aficionados a la tecnología.
A don Adriano (de ahora en adelante mantendré el calificativo de don) ya lo habíamos contactado antes pues en su calidad de Concejal de la comuna de Quinta Normal nos dio el dato de un alumno que necesitaba un computador, alumno al que le llevamos un notebook donado por usuarios de la comunidad.
Don Adriano es un hombre que se mueve tranquilamente a pie y locomoción colectiva por la ciudad con la soltura de quién se sabe querido, lo que ha llevado a crear el mito de los avistamientos en cualquier lugar de la ciudad. No es raro leer en RRSS "oye, vi al Compadre Moncho esperando el Metro" o "me topé con Adriano Castillo caminando por Huérfanos" lo que ha generado el mito urbano de que nuestro entrevistado tiene el don de la omniprescencia.
Y así, hace un par de sábados el equipo periodístico de Capa9.net (vale decir, Zuljin con el celular grabando) se reunió con don Adriano Castillo en el liceo en donde nuestro excelentísimo entrevistado cursó sus años de humanidades (educación media para nosotros), el Instituto Nacional. Llegó caminando con su afro con canas laterales (una especie de Doctor Strange funk), tomamos unas fotos y nos fuimos a conversar un café por lo que ahora les puedo contar su historia.
Así como lo ven, el hombre tiene 81 años y sigue activo en teatro, siendo concejal y pitutos varios.
Como nace un programador
Quizás ya sabían que don Adriano estudió en el Instituto Nacional y si no lo sabían ahora se enteran. Y también deben saber que en esa época ya existía la separación de Matemático - Humanista - Biólogo/Químico que estilan algunos liceos para profundizar ciertas especialidades. Sin ir más lejos yo fui compañero de curso en segundo medio (equipo de baby, puestos colindantes y todo eso) de Rómulo y cuando llegamos a tercero medio él se fue a Biólogo/Químico y yo a Matemático: Rómulo ahora lidera una investigación revolucionaria relacionada con el mal de Parkinson y yo por mi parte publico memes en Capa9.net.
Y volviendo a don Adriano, él optó por la especialidad de Biólogo/Químico del Instituto Nacional. Si queridos lectores: no fue ni humanista (por su oficio de actor) ni matemático (por su oficio de programador) sino que fue al Biólogo/Químico que lo dejó muy bien rankeado para ingresar a la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas de la Universidad de Chile.
Para agregar más logros debemos destacar que don Adriano ganó un torneo de fútbol en la Facultad aunque seamos sinceros: en una facultad de ciencias difícilmente estarán los mejores jugadores de toda la universidad (es como ser campeón de la escuela de informática, si no te caes al dar dos pasos ya estás validado para jugar).
Entre estudio y estudio ocurre algo que le moverá el piso a su orientación vocacional: lo invitan a participar en una obra teatral de estudiantes con un éxito tremendo, actividad que continúo realizando durante el transcurso de la carrera de Químico Farmacéutico.
Ya egresado y mientras preparaba su tésis de la carrera de Química y Farmacia le ofrecen un trabajo formal como... ... actor de teatro. Ah, ¿ustedes creyeron que iba a decir "programador"? Nope, actor de teatro. La tesis nunca la terminó así que don Adriano es (y el mismo lo aclara con todas sus letras) un egresado de Química y Farmacia pero no titulado.
¿y la programación cuando?
Pues bien, hasta el momento tenemos que nuestro protagonista es un actor de teatro. En eso, uno de los múltiples amigos de don Adriano Castillo le hace una propuesta indecente:
"¿Te animas a trabajar con una computadora IBM 1401? "
Que te hagan esa proposición en esos años puede sonar como si te invitaran a invertir en quesitos mágicos. De hecho es más creíble que un amigo tuyo te invite hoy en día a ir al espacio a que un amigo tuyo en la década del 60 te ofrezca una pega enseñándote a operar a unas mainframes salidas de ciencia ficción.
Obviamente don Adriano se animó a embarcarse en el proyecto.
¿Cuantos programadores han respondido "si sé" cuando les preguntan si saben programar en un lenguaje que claramente no dominan?
Acá tenemos que meternos en el contexto histórico: no existían las computadoras personales como las conocemos ahora, las instituciones (empresas) difícilmente podrían tener lo que hoy conocemos como "servidores" porque simplemente NO EXISTÍAN y por lo mismo el oficio de programador, con preparación formal y todo eso, tampoco. A nivel mundial la programación era territorio desconocido y para más remate era un mundo SIN INTERNET, SIN STACKOVERFLOW, SIN UDEMY, SIN CAPA9 .
¿Entonces cómo es que don Adriano llegó a programar para una IBM 1401?
La IBM era una computadora tal como el concepto lo dice: computa, realiza cálculos. Muy rudimentaria para los tiempos actuales pero realizaba una función indispensable: hacer cálculos sin equivocarse a una velocidad mucho mayor que la que un grupo de personas puede dar y con una tasa de fallos mínima. La IBM 1401 era una computadora (de la categoría mainframe) que se ARRENDABA a instituciones para que realizara esos cálculos en sus operaciones diarias. Si señoras y señores, era muy raro que una empresa tuviera su propio mainframe porque eran caríiiisimos tanto en la compra como en la mantención así que lo terminaban arrendando.
IBM 1401 periféricos incluidos. La impresora ya se veía temible y traicionera igual que las actuales.
Así como un vehículo es inservible sin alguien que lo dirija, una computadora es una calculadora inútil sin una inteligencia que le diga que hacer y como acá en Chile no existían algo así como programadores trabajando en otros lados a los cuales llamar, cuando se requería instalar y poner a operar una mainframe generalmente buscaban gente con ciertas habilidades para ser capacitadas en el desconocido y arcano arte de la "programación".
Cómo decía un profesor de informática la programación es el arte de los diagramas de flujo. Memorizar sintaxis de un lenguaje es una cosa, realizar un buen diagrama es una muy distinta y esa es la razón de por qué no todos los informáticos son buenos para programar y por qué hay buenos programadores que ejercen otros oficios. O parafraseando al afamado crítico Anton Ego, "No cualquiera puede convertirse en un gran programador, pero un gran programador sí puede provenir de cualquier lugar".
Además tienen que considerar que el poder de cálculo de la IBM 1401 era ínfimo en comparación a las máquinas de ahora (tu smartphone es más poderoso que la 1401) y un buen diseño de diagrama puede ahorrar horas y días de ahorro en tiempo de proceso. Hoy si tu diagrama es deficiente puedes arreglarlo metiéndole más procesador o memoria ram a tu computador pero antes eso no era posible. Para más remate estos maquinones no tenían casi almacenamiento "persistente" (a.k.a. un disco duro) y si se te apaga la mainframe abruptamente antes de que termine el cálculo de lo que sea que estabas haciendo, PERDISTE DÍAS DE TRABAJO. Acá una anécdota
Como era el primer computador en Chile, la IBM lo mostraba a otras empresas interesadas en tener uno. Un día, un visitante, al mismo tiempo que apretaba un botón, preguntó: ¿para qué sirve esta tecla? Resultado: interrumpió una operación que llevaba horas y las visitas en adelante fueron restringidas.
Volviendo a don Adriano, el amigo lo invita a programar diagramas para la IBM 1401 que se requerían en una institución pública y que consistía en cálculos de dinero de trabajadores. Y como don Adriano nunca le hizo asco a ninguna pega y cualquier proyecto le venía interesante, dijo que si.
Ahí lo capacitaron y lo enviaron a trabajar: su labor consistía en diseñar los diagramas de flujo del proceso de negocio pero no era una tarea de programación tal como la conocemos ahora (sentado en un escritorio 9 horas al día tapado en café con el jefe de proyecto preguntando "como va" cada 30 minutos), sino que se tenía que presentar a diagramar cada tantos días.
¿Y cómo se enteraba la IBM 1401 del diagrama de flujo? El "programador" le entregaba el diagrama de flujo a una operadora especializada que lo transformaba en tarjetas perforadas, que luego se inserta en la mainframe para que lo lea y comience a trabajar.
En una era en donde ciertas computadoras no tenían lenguajes e intérpretes como los conocemos ahora y por lo mismo no había un teclado, una forma de ingresarle instrucciones era la tarjeta perforada que permitía transformar todo en unos y ceros que a fin de cuentas es todo lo que necesita una computadora para saber qué hacer. ¿Y recuerdan que otro sistema usaba tarjetas perforadas?
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Al final la experiencia de don Adriano en el arte de la programación fue de meses porque, reitero, en ese momento este oficio no estaba tan firme como para pensar en dedicarse a esto como trabajo a tiempo completo y además seamos sinceros: debe ser mucho más interesante participar en obras teatrales a lo largo del país a sentarse en un edificio del centro de Santiago a escribir y digitar cosas ininteligibles para el 99% de los mortales (lo sé por experiencia propia ).
En la conversa con don Adriano me enteré de mil cosas que escapan al tema principal y que definitivamente deberían estar en una biografía, pero les cuento que luego de este paso por el iniciado mundo de la informática don Adriano volvió a las tablas y a los pitutos, actividades que le reportan un nivel de ingreso tal que le permitían tener una vida plácida que lo mantiene en un excelente estado de salud física y mental para sus más de 80 años. Yo conozco personalmente a varios de los usuarios de Capa9 y les aseguro que don Adriano está en mejor condición física e intelecual que muchos de ustedes.
Al final de la entrevista Capa9.net le obsequió a don Adriano un Pendrive Kingston Exodia. Este regalo no fue al azar pues tiene un sentido histórico y es que en la época de los mainframes como los que le tocó diagramar a don Adriano, las unidades de almacenamiento eran enormes y carísimas en comparación con un pendrive de bolsillo como el que obsequiamos.
Ahí tenís pendrive de bolsillo
Actualmente don Adriano es concejal de la comuna de Quinta Normal que es el sector en donde vivió en sus años mozos, y a pesar de que le han ofrecido postularse a diputado se ha negado pues ser diputado requiere dedicación exclusiva y genera un nivel de estrés abrumador, lo que le impediría mantener su relación con la actuación que si es posible legal y mentalmente siendo concejal.
Desde Capa9.net corporeichon agradecemos el tiempo que don Adriano Castillo nos brindó. Una persona con clase, sencilla, con estilo, sabiduría y generosidad: un tipazo con todas sus letras
PD: Ah, me faltó un oficio por agregar: Personaje de comic.
y estén atentos a la próxima entrevista: @Dagmita , nuestra mod de corazones, entrevistará a Chayanne y su experiencia programando la viborita en Atari.
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